LUIS CHITARRONI
Cosecha antojadiza de columnas, artículos, obituarios, presentaciones, homenajes, charlas, prólogos y
ensayos escritos en el transcurso de casi tres décadas, el presente volumen -como todos los suyosdocumenta la lealtad de Luis Chitarroni a una especie de plan infinito y su invencible aversión al texto
definitivo. La escritura apenas traza aquí un surco siempre caprichoso y tornadizo en el océano de
lecturas que la sustenta. Y no hay mejor procedimiento para caracterizarla que recurrir a las fórmulas que
el mismo autor emplea para hablar, con devoción a menudo tan contagiosa, de otros escritores. Cabe
decir, así, que -como en el caso de Borges- las paradojas y la precisión adjetival son sus piezas
entomológicas (retóricas) favoritas; que comparte con Chesterton una curiosidad sin límites, el
exterminio de la apatía y la violencia inmóvil; que es una neurosis desorbitada la que tantas veces
explica -como ocurre con Henry James- el reemplazo de una oración entera por una paráfrasis; que,
como Faulkner, jamás condesciende a revelarle al lector lo que ignora.